Dembélé la lía (y muy bestia): “¿Gastroenteritis?”. El escándalo que Messi, Piqué y Luis Suárez tapan

El delantero francés protagoniza un nuevo episodio en el Barcelona

Las excusas de Dembélé están empezando a quedar en entredicho. El delantero francés achacó sus ausencias en los entrenamientos de hace semanas a una supuesta gastroenteritis. Pero parece que la realidad fue muy diferente.

Ousmane Dembélé va camino de terminar siendo una de las operaciones más ruinosas en la historia del Barça.

El club azulgrana pactó más de 145 millones de euros por su compra, entre fijo y variable, con el Borussia Dortmund y, ahora no encuentra a quien colocarle el problema por una cifra presentable.

El club azulgrana no encuentra comprador que se acerque a los 100 millones. Las ofertas, en este sentido, no llegan ni a los 80 ‘kilos’.

Desde club guardaron silencio y Piqué, Messi, Luis Suárez y el resto de sus compañeros le taparon. Pero ahora saben lo que realmente ocurrió y se han cansado de ayudar a Dembélé a callar sus mentiras.

La sorpresa ha saltado en el entrenamiento en la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí. Una sesión de trabajo que había programado Ernesto Valverde a la que no acudió Ousmane Dembélé. Y es que el asunto no ha acabado ahí.

Algunos empleados del club intentaron contactar con el francés, aunque sin éxito. Más de una hora y media después el delantero dio señales de vida. Una vez que consiguieron hablar con el jugador, mandaron a su domicilio al servicio médico para confirmar la dolencia y tratarle de la misma. Unas horas más tarde, fuentes oficiales del club apuntaron a una gastroenteritis como motivo de su ausencia.

El problema de Dembélé están siendo los videojuegos hasta altas horas de la madrugada acompañados de comida basura. Todo ello, acompañado por su séquito de amigos, que a algunos le empiezan a recordar a los ‘toiss’ de Neymar. Una mala influencia que podría truncar la carrera del joven futbolista francés.

Parece ser que Ousmane es reincidente en esta conducta. Estas fiestas gamer son algo habitual en la vida del futbolista. Aunque nunca se le habían ido tanto de las manos.

Y cuando los servicios médicos se trasladaron a la residencia del jugador no podían dar crédito.

Al día siguiente, sus amigos seguían dormidos en el domicilio y la comida basura del día anterior aún seguía en la mesa. Parecía claro que esa noche Dembélé no estuvo descansando precisamente

Los malos hábitos del francés están descontrolados y su situación preocupa mucho al Barça. Nadie duda de la calidad del joven futbolista pero ven que su carrera puede quedar truncada si no se lo empieza a tomar más en serio. El castigo de Valverde se puede alargar en los próximos partidos a menos que el cambio de actitud sea evidente.

Fuente: www.diariogol.com

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